Óscar Cala López nació el 25 de octubre de 1991 en el municipio gaditano de San Fernando. Tras unirse a la Compañía en 2012, realizó el noviciado en San Sebastián y el Juniorado en Salamanca, antes de cursar estudios de Derecho y ADE en ICADE, Madrid, entre 2016 y 2019. Después de un paso por Sevilla para el Magisterio y de formar parte del Equipo de Promoción Vocacional de la Provincia, realizó la teología en Madrid. En los últimos dos años, ha formado parte de la Revista América desde Nueva York y ha cursado la Licencia en Teología en Boston.
Ilusión y emoción
Los días previos, Óscar tiene la ordenación y su primera misa ocupando un lugar importante en su corazón. Sin embargo, la mirada va más allá: hacia el ministerio que comienza y que le hace tremendamente feliz.
“La ordenación sacerdotal aparece como la confirmación y profundización del paso previo que ha sido el diaconado”.
Una llamada al sacerdocio unida a la vocación jesuita
Pero, ¿cómo descubrió su vocación sacerdotal? Para Óscar, vino todo junto. Él venía de una parroquia de Carmelitas Descalzos y de un Colegio Mayor Claretiano. Sin embargo, la formación religiosa que recibió con la Compañía de María y las experiencias pastorales que hizo con ellas, moldearon su forma de entender el mundo, a Dios y a sí mismo.
Cuando años después se encontró con la Compañía de Jesús, conocer a varios jesuitas, cómo trabajaban y hacer sus primeros ejercicios espirituales, se le encendió la luz. De pronto, todo encajaba
Cercanía de Dios y de la Compañía
Óscar piensa que este camino es la mejor vida que puede vivir. Aunque no todo sea facilidad o seguridad, sí experimenta la cercanía de Dios y de la compañía en todos los sentidos, que le guía, nutre, cuida y anima a lo largo del camino.
Por ello, ve cómo en este periodo Dios le ha dado humildad y realismo. Conocer a Dios ayuda a conocer al ser humano y a uno mismo, además de haber recibido ojos de misericordia para aceptar el mundo como es, y también su propia realidad.
Sin embargo, explica que el mayor regalo es poder acompañar espiritualmente a las personas a lo largo del tiempo, y ver cómo Dios actúa en sus vidas desde un lugar privilegiado, la honestidad de las respuestas y la confianza que depositan en él.
Respecto a las dificultades, Óscar se ha encontrado con sus propias realidades a la hora de madurar y crecer, aunque añade y bromea, "no en altura". Desde que entró en la Compañía con 20 años, hasta los 34 con los que se va a ordenar, ha experimentado ajustes y reajustes, pero continuando con el plan de vida que sus padres empezaron en él.
Un jesuita en Nueva York
Estos últimos meses previos a la ordenación ha estado destinado en Estados Unidos, primero trabajando para la Revista América en la gran manzana, a la par que estudiaba inglés, para finalmente hacer teología en Boston. Ha sido un tiempo para estudiar, leer y escribir como nunca antes lo había hecho, pero también para afrontar las diferencias gastronómicas y culturales: con paciencia, humor… y un "capote de Dios", para salir adelante
“En Nueva York, la comunidad fue tremendamente acogedora y cariñosa, la ciudad me ayudó a reconectar con mi pasión por la cultura y el arte, y a redescubrir la soledad”
Una vocación de pastor
En cuanto a lo que le diría a un joven que se esté planteando la vocación sacerdotal, da una respuesta tajante: ¡No lo dudes tanto! Así lo ve él, releyendo todo su camino de vocación en sus cuadernos de los ejercicios espirituales.
A tan solo unos días de su ordenación, Óscar se ve reflejado en el diálogo entre Jesús y Pedro (Jn 21).
Me veo dando un paseo con Él por la playa de Camposoto de mi ciudad, recordando toda mi vida y escuchando como vuelve a llamarme “a pastorear sus ovejas”.
Óscar Cala López SJ recibirá la ordenación sacerdotal de manos de D. José Rico Pavés, obispo de Asidonia-Jerez, el día 5 de julio de 2025 en la Basílica Menor de Nuestra Señora de los Milagros en El Puerto de Santa María (Cádiz).
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